lunes, 23 de noviembre de 2009

Imposible unificar la Iglesia sin la ordenación de mujeres.

El arzobispo de Canterbury se entrevistó con el Papa. Ocurrió en Roma el sábado 21 de noviembre. Según las informaciones, especialmente desde Londres, Rowan Williams tenía la intención de presentar a Benedicto XVI varias cuestiones relacionadas con el ingreso de anglicanos a la Iglesia Católica Romana.

El tema de los sacerdotes casados es uno de los espinosos tópicos de la conversación entre la cúpula Anglicana y el Vaticano. El otro es el de la ordenación de mujeres, para lo cual Williams habría sostenido que “si el Papa quiere unificar de verdad a todo el cristianismo no puede hacer distinciones entre hombres y mujeres”.

Según el Arzobispo de Canterbury "Para muchos anglicanos, la no ordenación de mujeres sacerdote es un problema porque implica hacer una diferenciación entre los hombres y las mujeres bautizados", con lo cual deriva la discusión centrándola en un sacramento altamente apreciado en ambas iglesias.

En una información proveniente de Londres y distribuida por el Movimiento Teología de la Liberación –Chile, se reitera que la decisión del Papa, de crear una opción estructural para la recepción de anglicanos, tomó por sorpresa a Williams, que sólo supo de la iniciativa un par de días antes del anuncio oficial.

Entre las bases anglicanas la resolución de BXVI se la ve como un intento de Roma para acabar con el anglicanismo pescando entre los sectores anglicanos que se oponen a la ordenación de mujeres. También se la asocia a que, en tiempos de crisis, el Papa reunifica los sectores más duros del cristianismo avanzando también los lefebvrianos. + (PE)

---

Publicado por Ecupres del 23 de Noviembre de 2009
http://www.ecupres.com.ar/noticias.asp?Articulos_Id=4147

---

No hay comentarios:

Publicar un comentario