La Corte Suprema de Estados Unidos rechazó la apelación del Vaticano para obtener inmunidad en un caso de abusos sexuales por parte de sacerdotes en Estados Unidos.
La Corte confirmó la decisión de un tribunal para suspender la inmunidad del Vaticano en un caso de un eventual sacerdote pedófilo en Oregón. El fallo, producido el lunes 28 de junio, establece que un tribunal estadounidense podrá examinar la calidad de "empleador" del Vaticano con relación al sacerdote en cuestión, para decidir si puede seguirse el proceso contra la Iglesia Católica Romana.
El caso es de una persona que denunció haber sido abusada sexualmente, en 1960, por un sacerdote irlandés en Portland, Oregón, cuando el cura ya había sido acusado de pedofilia en Irlanda y Chicago.
La decisión del Tribunal Supremo de Estados permite la continuación de las causas civiles por pedofilia y abre la posibilidad de convocar, como testigo o acusado, al Papa ya que el caso en Oregón colocaría a la institución católica como responsable de las agresiones sexuales de sus miembros. Por su parte el Vaticano alega que los integrantes de la Conferencia Episcopal norteamericana no son asalariados del Vaticano por lo que no se lo puede considerar responsable de sus decisiones.
Un juicio similar se desarrolla en Kentucky, donde el Vaticano también reclama inmunidad diplomática y en el que se acusa a Benedicto XVI de haber conocido y ocultado los hechos de de abusos sexuales cuando era prefecto para la Congregación de la Doctrina y de la Fe. En este caso no se acusa a la curia o al papado, sino a Ratzinger directamente.
Desde el Vaticano se hizo conocer el desconcierto y la indignación por lo que se considera un "golpe bajo al derecho internacional". Una actitud similar se tuvo la semana pasada en relación con lo ocurrido en Bélgica donde el Estado usó su derecho para investigar en las sedes parroquiales de la Iglesia Católica Romana (ICR).
La Conferencia Episcopal de la ICR de EE.UU aplicó la estrategia de pagar indemnizaciones para evitar los juicios a sacerdotes acusados de pedofilia. Los abogados de las víctimas de abusos calculan que, en las últimas tres décadas, la Conferencia Episcopal norteamericana pagó más de 2.000 millones de dólares para compensar los abusos cometidos por unos 4.000 sacerdotes católicos. Además, varias diócesis se declararon en bancarrota al no tener los recursos económicos para hacer frente a los juicios.+ (PE/Movimiento Teologías de la Liberación-Chile)
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Publicado por Ecupres - Prensa Ecuménica el 29 de Junio de 2010
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