sábado, 22 de enero de 2011

Carta de un cura a otro: el padre Laporte le contesta al malargüino censurador

"Igual que al periodista, me dieron ganas de llorar", sostiene en una nota Rubén Laporte, el sucesor del padre Jorge Contreras en el barrio La Gloria, al relatar lo que sintió cuando se enteró de las nuevas declaraciones del cura Gómez. Le pregunta si no se escandalizó con una serie de injusticias evidentes, que enumera en esta nota.

"La verdad es que tengo muchas cosas en la cabeza. He tratado de ordenarme un poco para pensar mejor, pero no ha sido fácil y no sé si lo he logrado. Desde que apareció la noticia del padre Pato y lo que sucedió en Malargüe me llamó mucho la atención que un sacerdote de la iglesia católica hiciera lo que hizo".

Así inicia su carta otro sacerdote, Rubén Laporte, párroco de la iglesia Virgen Peregrina del barrio La Gloria. Le sucede en "el puesto" a un gran hombre: el padre Jorge Contreras. Con ese espíritu, se percibe, se sienta a escribir su reflexión. Por momentos parece un pensamiento en voz alta, pero es una carta a Jorge Gómez, el insólito religioso malargüino adscripto al grupo del Verbo Encarnado que pasó a la fama este fin de semana cuando MDZ dio a conocer su acto de censura a la Coral Luthiereces.

Laporte está dolorido. Reconoce que la noticia le impactó y frena un rato en medio de la tarea de repintar la parroquia junto a los vecinos del barrio para escribir esta nota.

Sincero, le dice: "La verdad, me pareció bastante flojo de su parte". El cura radicado en el populoso barrio godoycrucino consideró que "ese exabrupto fue poco feliz. Por un lado, pensaba que a la ofensa respondió con ofensa, subiendo y faltando el respeto de la misma manera. Algunos dirán, o dijeron, y ¿cómo quiere que reaccione? a lo que yo contesto más de lo mismo: a la falta de respeto no se la soluciona por la misma vía. Ni siquiera podemos justificar un mal haciendo otro mal. Claro el Padre Pato -agregó Laporte en su carta- dijo que le habían faltado el respeto a su sacerdocio y celibato".

En este punto, el joven sacerdote que sufrió la pérmida de su hermano, taxista, a manos de la delincuencia, se preguntó: "¿Realmente le faltaron el respeto? ¿o será que estamos muy a la defensiva? A veces pienso, y me puedo equivocar, que cuando uno reacciona mal, por algo que dicen, es que uno tiene cola de paja. Con ese criterio de saltar por cualquier cosa, se imaginan viviríamos a discusiones e intromisiones eternamente. Como dice una amiga mía: ´Si te enojás por lo que te digo, es porque tengo razón´".

Laporte cuenta en su misiva que cuando se enteró de las declaraciones radiales del cura Gómez en las que afirmó que era "diez mil veces más grave que se viole la fe a que se viole a una niña", "me dieron ganas de llorar, igual que al periodista", en referencia a la confesión que, al aire, dio el periodista que hizo la pregunta, Cristian Molina.

"Llorar escribió Laporte- porque todavía algunos hermanos curas creen y se sienten con el poder de hacer y decir lo que quieren y la gente los debe entender. Espero que así como el vocero del obispado salió a defenderlo, cosa que respeto, también lo haya llamado para preguntarle por qué dijo lo que dijo y de paso nos vendría bien a todos como iglesia que se pidan disculpas públicamente de lo dicho por radio. Al menos las pido yo, muchos bastantes no pensamos como él y sé que la gente sabe diferenciar".

La fijación de la Iglesia con "ese temita": otros motivos de escándalo "Como hace bastante tiempo sigo pensado -señaló el padre Rubén- que nosotros como Iglesia no sólo nos tenemos que preocupar e interesarnos por los problemas de órden moral sexual. Espero que en todos lados no sólo nos escandalicemos cuando se hable sobre el sacerdote o el celibato y espero que sí nos escandalicemos cuando en algunas escuelas no todos pueden acceder a una buena educación, cuando nuestros abuelos no tengan que hacer semejantes colas al sol para cobrar su jubilación".

Agregó que "espero que no nos dé lo mismo que cuando hay que enterrar a un jubilado tengamos que deambular por varios lugares hasta encontrar algunas cocherías que no les cobren por adelantado. Espero que cuando se explote a los trabajadores nonos dé lo mismo y también nos pronunciemos. Espero que apoyemos a la gente de nuestros barrios para vivir cadá día mejor.

Espero que la Iglesia haya dicho algo en el Sur, cuando se compraban una enormidad de tierras y se cercaban los terrenos, matando la vida de los puesteros y el peregrinar de sus animales.

Espero, que no esperemos más." Finalmente, Laporte aportó su pensamiento reflexivo y crítico y la defensa de su condición de religioso: "No me resigno, esa no es una virtud cristiana, espero y trabajo y creo que podemos vivir mejor, por eso Dios se hizo hombre para mostrarnos el verdadero rostro, el de hijos de Dios y hermanos entre nosotros".

- - -
Publicado por MDZ On Line el 19 de Enero de 2011
http://www.mdzol.com/mdz/nota/267165

No hay comentarios:

Publicar un comentario